:::::::::::::::::::::::::::: Japonés :::::::::::::::::::::::::::
-Michael, no sabía que te gustaba la comida japonesa.
-En realidad Johnny, me gusta de vez en cuando, sobretodo cuando sabe bien.
-Ey, le dijiste a Saly que tuve muchas chicas y que era muy coqueto. ¿Por qué hiciste eso?
-Saly, respóndele por qué te dije eso.
Entonces en medio de su conversación solicitaron mi respuesta.
-Ehhh Yoo… Pues Michael dijo: “Apuesto un pomo de nutela comprada en el súper personalmente, que Johnny te pregunta si somos novios o que si tienes novio, y además te pide tu teléfono”. Y como sólo me preguntaste si tenía novio y lo primero de que si tenía algo con Michael… Pues la apuesta no la voy a pagar ya que no me preguntaste mi número de celular.
-Jajajaja. no entiendo por qué dijiste eso jajajaja.
Dijo JD
-¿Acaso es mentira?, si te preguntara; si tuviste muchas novias… ¿Qué dirías?
-Yo diría que es correcto.
-Y si te pregunto… ¿Siempre le preguntas a las chicas que te gustan porque se ven indefensas… que si tienen novio, tú qué dirías?
-Ahhhh Jajajjajaj. ¡Qué vergüenza Mike!
-¿Eso dirías?
-Pues Saly es linda, y sí, sí se ve indefensa aunque patea hombres y piensa que nosotros somos del diablo.
-JAjajajajajaj. Saly, eres tan graciosa jajajajajja.
Dijo Michael Escupiendo el arroz en su plato cuando escuchó a Johnny decir eso tan convencido.
-Eso es una verdadera broma, amigo del cabello largo.
Dije con tono de que no se crea lo que le digo.
-¿Pues qué dices a mi pregunta?
Insistió Michael.
-Pues te diría que también es correcto. Sí lo hago. Ahora yo te pregunto. ¿A ti te gusta Saly como amiga o como novia?
Entonces casi me atoro con el alga del arroz enrollado. Y Michael respondió.
-Saly me gusta de las dos formas. Ella es mi amiga y la quiero mucho y además es una hermosa mujer. ¿A quién no le gustaría salir con ella? No sé si me gusta como novia porque en este momento no es mi novia.
-¡Qué astuto eres Jackson! Es una respuesta… ¡Muy astuta!
Se inclinó hacia delante mientras le dijo eso a Michael. E hizo una sonrisa muy pícara de planear algo. Luego se acercó al oído de Michael.
No escuché absolutamente nada pero él me miraba mientras le decía más de cinco cosas al oído. Para salir de esa situación incómoda, no me quedé callada.
-No sean mal educados. No está bien hacer eso.
-Perdón Saly, es que Johnny me daba una opinión positiva de lo que tú le pareces.
-Mmmmm no entiendo. ¡Ya basta chicos! Mejor cambien de tema.
::::::::::::::::::::::::::::::fIN Flashback ::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
Y ellos felices hablando no sé de qué…
Johnny no era muy presumido, al menos no tanto como lo era Michael. Un chico sencillo y franco.
Después de pasar ahí dos horas o casi tres. Ellos me acompañaron a casa.
¿Y saben qué sentía? Me sentía un poco rara, como que quería acoplar una pieza de madera dentro de un rompecabezas de plástico. Por un lado me sentía afortunada de tener de nuevo a Michael como mi amigo y por otro lado muy en el fondo sentía que faltaba algo.
Entonces me quedé dormida y soñé algo más raro que la vida real. Muchos gatos sujetaban mi cabeza y me la aplastaban tanto que esta se quería reventar. Yo quería gritar pero ellos me tapaban los ojos y la boca.
Eran cuatro de la mañana y estaba asustada por la sensación de rasguños en mi rostro y piernas, por esas garras afiladas, esos gatos gigantes.
¡Qué sueño tan raro! Si los gatos son los animales más indefensos que he conocido.
***
Intenté descansar de nuevo un pequeño momento más pero no pude así que me puse a trabajar.
Creé la historia de un gato y un ratón. Estos pertenecían a una banda de rock y viajaban por todos los callejones haciendo conciertos y llevando canciones que inspiraban.
Espero que les guste en la editorial.
Luego llegó las diez de la mañana… Y Michael timbró a mi celular seguido del intercomunicador de casa y para mi mala suerte, Papá estaba ahí.
-¡Hija, te habla un tal Michael!
Gritó desde la sala y yo le respondí con la misma energía.
-¡Sí papá, estoy con él por teléfono!… Disculpa es que papá fue quien te respondió.
Y Michael respondió como en susurros a través del celular…
-Gracias linda, ¿Puedo pasar a conocer a tu papá?
-¿Estás seguro que quieres cometer ese error?
-Jajajaj, claro que sí.
Entonces salí de la habitación y grité.
-¡Papi, ábrele a mi amigo por favor!
-Vale. Puedes pasar.
Entonces bajé y le abrí a Michael la puerta del vestíbulo. Papá estaba sentado en el mueble de la sala, en pijamas y leyendo un periódico.
-Hola lindo, pasa.
-Gracias Saly. ¿Dónde está él?
-Ven conmigo, te voy a presentar.
Nos acercamos frente a él con mucha cautela, papá no despegaba los ojos de su diario. Entonces aclaré la garganta y dije mientras que veía a Michael y le guiñaba un ojo.
-Hola papá, te presento a mi novio.
Entonces papá transformó su cara delante del diario, se paró como distraído y luego me miró con los ojos bien abiertos y enfurecidos. Habló sarcásticamente.
-Michael, él es papá. Papá él es Michael Jackson.
Entonces mi papá aún sin verlo se rió y luego le tiró una mirada con una ceja alzada.
-Si tú eres Michael Jackson, yo soy Tina Turner.
-Señor, yo soy Michael Jackson.
Michael estiró la mano. Papá la vio y apretó la mano de Michael con firmeza.
-¿Mi hija novia del Príncipe del Rap?
-¡Papá, él hace música pop!
-Da igual.
-Además él es el Rey del pop no del Rap.
-Mi hija no es tu novia.
Entonces Michael y yo comenzamos a reírnos.
-Era broma papá, no somos novios. Michael es un buen amigo.
Papá nos miró y empezó a reír
-Jajaja, tú crees que no tengo ojos, Saly. Yo sé que este respetable señor gusta de ti. Tú eres una chica joven y linda, ¿Qué más quisiera él que tenerte en una vitrina?
-Señor, con amor y desde mi corazón le digo. Yo amo a su hija y la respeto. Ella es sólo mi amiga.
Michael hizo esa cara de inocente que utilizaba cuando estaba conmigo y quería que lo apapachen.
Papá lo miró convencido del puchero de Michael y le dijo.
-Lo sé hijo. No te conozco nada, pero sé y estoy seguro que si le haces tan sólo algo más a mi hija, si la pones triste de nuevo como todos esos meses que esperó que le llames mientras tú vivías tu mundo musical. Yo te juro que te mato con mis propias manos. Ella es mi hija, quizá todavía no sepas qué es eso, una hija…
Michael interrumpió.
-Tengo una hija pequeña, y daría mi vida por ella. Entiendo lo que me dice.
Y una voz loca nos interrumpió…
-Yuhuuuuu Yuhuuu, ¿Hay alguien en casa? ¡Ohhhhhh! Una reunión familiar, yo también quiero participar.
Era Johnny “El loco Deep rastafari” que interrumpió ese mágico momento… Esta vez estaba bañado y muy atractivo. Ya no llevaba la gorra de rasta y los pantalones sueltos. Tenía unos pantalones apretados de color negro, mezclilla, unas botas de punta y el cabello mojado y amarrado en cola de caballo. Y algo que lo cubría de arriba, como una chamarra entre militar, policía e indigente.
-Papá él es Johnny Deep, un amigo.
-Mucho gusto señor Willbrand.
-Oh el gusto es mío.
-Gracias por permitirme saludarlo, señor Willbrand.
Dijo Michael.
-Saly, ¿tú te has ido a buscar amigos o a buscar artistas?
Todos excepto papá nos comenzamos a reír.
-Papá Jajajaj, pues no fue planeado.
***
Luego de ese incidente, me fui con dos atractivos hombres en un auto con lunas polarizadas a pasar un excelente día.
…
llegamos a casa de Johnny, era una casa regular pero cuidadosamente ordenada, algo que no me esperaba, sobretodo porque se veía tan hogareña. Ah y había un detalle que era más que obvio mencionar…
Sí, era una casa grande, jardines por delante y detrás…
-Bienvenidos, jóvenes aventureros. “La aldea francesa en todo su esplendor”
-¿Cuánto tiempo te demoraste en renovarla?
Dijo Michael.
-Pues aún no he terminado pero ya casi cinco meses.
-Y tú Saly ¿Cuándo te compras tu casa?
Me dijo Johnny.
-Pues no lo sé… Esta casa me gusta pero siento que es demasiado grande y demasiado espacio desperdiciado. Creo que compraré una mansión simple, que al menos tenga un campo de softball, y una hermosa alberca. Y un pequeño establo con dos caballos. Como Chiken y Little, ellos eran mis caballos de la antigua casa de mis padres. Ah pero eso sí, mi alberca será techada y temperada porque no me gusta mucho el sol. Por eso es que espero siempre el atardecer para poder nadar, ya que el agua salada y el sol hacen daño a la piel, la queman muy feo.
-Eso que dices del sol, dímelo a mí que no puedo solearme por el problema de mi piel.
-Oh Mike qué pena!
Dijo Johnny y luego me miró.
-Es cierto, quizá es mucho espacio pero me agrada ver un poco de naturaleza aquí. Y cuando la obtengas, tu casa, pues nos invitas.
-Claro que sí lo haré Johnny.
-Pasen chicos, están en su casa.
-Oh qué amable Johnny.
Dijo Michael mientras juntaba sus manos y añadía una sonrisa humilde.
Después entramos y nos mostró un poco de su casa. Caminamos más siguiendo a Johnny y nos invitó a almorzar.
Los guardias de Michael estaban afuera, ellos siempre lo vigilaban y observaban los alrededores en el exterior de la casa de Johnny.
Johnny había decidido comprar comida italiana, nos sirvieron personas que había llevado como mozos, era un almuerzo que se veía exquisito. ¡Oh y no saben lo que sabía!
Luego terminamos mientras MJ y JD hablaban de autos. Yo comenzaba a aburrirme y al fin después de casi dos horas y media de estar sobre la mesa, JD y MJ tomaban vino y se habían puesto un poco subidos de tono.
Michael le comentaba de una fiesta de globos, pistolas de agua que había organizado el mes pasado en Neverland por su hijo Prince. JD le presumía de que había comprado una Súper Soker Cheap Diy Water.
!Ayyy, hombres tenían que ser! Estaban tan impresionados por la pistola de agua de un metro, que luego querían llenarla de agua.
Pero felizmente no llegaron a hacerlo, así que después nos fuimos a la sala de TV del melenudo.
Puso la película y de pronto habían tres personas, en un lugar con poca luz, cada uno sobre un mueble muy cómodo, comiendo palomitas, tomando soda o jugo de naranja, y una de ellas se estaba durmiendo. Yo creo que era por el vino porque la película estaba muy buena.
-Entonces creo que sí nos quedamos dormidos, al menos eso me di cuenta cuando desperté y Johnny tenía sobre el pantalón unas cuantas palomitas, la cabeza recostada del lado derecho del mueble y Michael Tenía la cabeza hacia atrás, como desmayado de sueño.
-¡Hey chicos!
-¡Ay ya no vimos la película!
Dijo JD
-Yo sí la terminé de ver.
Dijo Michael
-Pues con eso suficiente, lo importante era que Michael la viera. Es que sí se pasaron con el vino. por eso les dio sueño. (Dije despertando)
-Saly, pero tú no tomaste vino.
Dijo JD
-Es cierto, pero verlos dormir me contagió de sueño. Creo que estoy muy cansada chicos, no dormí muy bien que digamos, soñé que unos gatos gigantes me atacaban.
-Jajajajaj ¡Qué locura!
Dijo JD
-Pues creo que ya es tiempo, tengo que volver a casa, quedé en jugar con los niños.
-Eso está bien Mike. ¿Y tú Saly, ya te tienes que ir?
-Pues no lo sé, no me esperan en casa y ya trabajé lo del día así que… Pues si quieres me quedo, ¿Pero, qué vamos a hacer?
-Pues vamos a la alberca del patio, y te mostraré todos los libros de terror que tengo y una colección genial que tengo en una de mis habitaciones, estoy seguro que te va a encantar.
-Vaya, eso suena interesante.
Michael, con un poco de incomodidad me dijo.
-Saly, si deseas quédate y vengo por ti en la noche, cerca de las nueve o diez. Te llamo por teléfono.
-¿Y por qué no se puede ir sola más tarde?
-Porque ella no tiene auto y además yo siempre soy quien la dejo en casa.
-Oh está bien…
Dijo JD. Luego Michael se acercó a mí y tomando mi cintura acercó su rostro al mío para darme un beso en la mejilla. (Marcó el territorio)
-Nos vemos más tarde, lindo.
-Claro que sí.
Dijo él guiñando uno de sus ojos.
Entonces Johnny y yo nos quedamos solos, él muy amable y caballeroso hacía cosas que no hizo delante de Michael. Me levó a su biblioteca, era bonita y adornada con colores azules y amarillos.
Nos sentamos en un mueble muy cómodo, era rectangular y no tenía respaldo, cada quién había escogido su libro pero JD insistía con mostrarme unas fotografías de la película “El joven manos de tijeras”.
Sí estuvo entretenido verlo, también ver otras fotografías de otros álbumes de películas, incluso vimos un making of de “The Brave”, fue muy interesante. Pero empezaba a cansarme aún más y no sabía cómo decirle que ya tenía sueño, apenas eran las ochos de la noche. Así que atiné a preguntar sobre él pero no quería hablar mucho.
-Saly, de mí no me gusta hablar, soy un chico normal que comete errores como todos, me gustaría ser mejor persona. Pero definitivamente me gustaría intentar ser un buen hombre para mi novia.
-¿Tienes novia?
-No pero quiero tenerla.
Me sonrió de forma coqueta.
-Ahh, pues bien por ti.
Le dije, pero él no quitaba esa mirada coqueta, se acercó más a mí pero yo retrocedí.
-¡Vamos! Sé que me entiendes.
Tomó mi mano y yo lo miraba a los ojos, tenía una mirada fuerte, era muy intimidadora.
-No entiendo… (Dije confundida)
-Saly, te hago una apuesta.
-¿De qué se trata?
-Pues me voy a acercar a ti, y estaré tan cerca que querrás besarme.
-Hagas lo que hagas, créeme, no me vas a convencer.
-Yo apuesto que sí.
Entonces él se sacó la chamarra y se quedó con un polo negro que estaba muy ceñido a su cuerpo y se podía ver sus músculos, luego se colocó un sombrero beige y lo ladeó un poco, tapando uno de sus ojos.
Se acercó sentado a mí con su rostro cerca al mío y se quedó ahí frente a mis ojos un par de minutos. Su respiración estaba sobre mis labios pero yo no bajaba la mirada, sólo veía sus ojos.
Él se puso nervioso de tanto verme.
-Jajajaj, te estás aguantando.
-No, claro que no, no lo hago. (Dije jugando pero a la vez era un reto que quería ganar)
-Tienes razón, quien no se aguanta soy yo… (Dijo como en una carrera)
Entonces se acercó a darme un beso, un beso apasionado, uno que agitó su respiración al triple. Luego me fui hacia atrás y me seguía mirando con esos ojos coquetos, pronunciaba las palabras muy despacio para provocarme.
-Tus labios son tan dulces. (Lo miré de forma amable pero no sentí nada en ese beso)
-Gracias por besarme, besas bien… Pero. Un beso sabe mejor cuando la persona que está frente a ti es el chico que te gusta. ¡Por favor, no se lo digas a Michael!
Le dije eso y me levanté del mueble, estaba seria. Me acerqué a él con una sonrisa tranquila, y lo abracé mientras él me decía. (Lo abracé para simplemente ser amable)
-No te preocupes, no se lo diré, es nuestro secreto. (Dijo con tranquilidad pero con cara de sospecha)
Sonreía muy coqueto y no dejaba de verme.
-Gracias. Ya le había enviado un mensaje a Michael, él vendrá por mí, no debe de tardar.
-Pensé que Michael era una persona ocupada.
-Por ahora está en descanso, había estado ensayando varios meses para su presentación del treinta aniversario de cantante. Están muy cerca las fechas, y decidió descansar dos semanas. Le dije que si podía verlo y él me dijo que sí, por lo que se está esforzando para pasar tiempo conmigo.
-Entonces son muy buenos amigos. Me alegro! (Había mucha curiosidad en sus preguntas)
-Sí, me encantó y me encanta conocerlo cada vez más.
-¿Y yo?
-Pues fue muy bueno el beso que me diste, muy atrevido pero aún necesito medir la locura que traes en la sangre Jajajaja. No puedes estar besando cada chica que te gusta. Tú eres muy atractivo pero deberías ser menos galante y más sincero. (Le guiñé un ojo)
-Jajajaj está bien. Sólo tenemos dos días de conocernos y me caes muy bien. Y estoy seguro que aún falta mucho más tiempo para conocernos…
De pronto se escucha un timbre muy sutil
-Oh, ese debe ser Michael.
Dije.
-Sí… Bueno Saly, ¡Fue un placer conocerte!
-Lo mismo digo.
Entonces me abrazó para despedirnos, los dos sonreímos de forma amigable.
Michael entró cuando yo salí para subir al auto, dijo que iba a despedirse, me hizo esperar por quince minutos y luego llegó de nuevo al auto y entró.
-¿Cómo te fue con tus niños?- Dije.
-Es hermoso pasar tiempo con ellos, me fue estupendo.
-Me alegro por ti, lindo… Oh no te imaginas el sueño que tengo.
-Sí, yo también me estaba durmiendo en el viaje hasta aquí. Por cierto. ¿Se portó bien nuestro amigo Johnny?
-Pues más o menos.
-¿Lo sabía, te dio un beso verdad?
-Emmmm pues… Sí, me dio un beso, dijo que era una apuesta de que yo… Lo iba a besar a él pero él me besó a mí y luego me quité y me levanté para irme.
-Mmm Salyyyyyyy, tienes que tener cuidado con él, ya te había hablado de eso. (Dijo preocupado y con muchos celos.)
-Pues no es muy diferente a ti, porque también me has robado un beso.
-Pero yo soy distinto, te conozco más, además fuimos novios.
-Jajaja, eres tan tierno. Pues sí, así es. No tienes de qué preocuparte, no me gustó porque fue muy atrevido… Luego te cuento con detalles… Yo te dije que no te lo dijera pero tenía que contártelo yo.
-¿Y te gustó?
-¿Qué?
-Me refiero al beso por supuesto.
-No… Te digo que fue muy frío. Es algo que ya ni si quiera recuerdo. Además me quité rápido, me pareció mal educado de su parte.
-Sí Saly, es mejor que yo esté presente cuando JD esté cerca de ti. No quiero que te incomode.
-Gracias lindo. Es un buen chico aunque un poco loco.
Entonces se acomodó mejor en el auto y me quedé dormida sobre su pecho.
…
El chófer nos levantó al llegar a casa y Michael me dijo que iba a estar ausente por dos días, tenía cosas que hacer, pero prometió llamarme.
Llegué a mi habitación y con la flojera que llevaba me quedé dormida sobre mi cama sin si quiera descolgar mi cartera de mi hombro.
De pronto entró una llamada de Michael.
-Holaaaa, ¿Por qué llamas tan tarde?
-Es que no podía dormir. No puedo dejar de pensar en ti.
-¿Y eso?…
-Es que estaba pensando muchas cosas. Pero sobre todo quería invitarte a casa, dentro de dos días… Te daré algo, es una sorpresa…
-¿Qué es, Michael?
-Es una sorpresa, no puedo decirlo.
-Está bien!-
-¡Descansa Saly!
-Descansa Mike!
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